La torre de televisión La Perla de Oriente, en Shanghai, es el símbolo de la ciudad y uno de los rascacielos que aparecen inexorablemente en las postales de los turistas.
El zoológico de Shanghai es el más grande de China y uno de los mejores del país. Está ubicado en el distrito de Nan Hui, cerca del centro de la ciudad, y ocupa un área de 153 hectáreas, consideradas una de las mejores opciones para disfrutar en familia.
Llegar por carretera a Shanghai no se considera una buena opción, por el elevado número de accidentes que se dan en las carreteras chinas y por el papeleo que hay que realizar antes de poder alquilar un vehículo, incluidas preguntas acerca de las normas de tráfico chinas, ya que China no reconoce el permiso de conducir internacional.
Si buscamos qué visitar en Shanghai, nos encontraremos con grandes contrastes, entre grandes y modernos rascacielos como el Shanghai World Financial Center y una China más tradicional, que podemos encontrar en el Templo del Buda de Jade o el Jardín Yuyuan, construido entre 1559 y 1577.
Viajar a Shanghai es hacerlo a una China moderna, de rascacielos y grandes centros financieros al nivel de Tokio. Pero donde también podremos encontrar barrios donde la vida sigue transcurriendo como hace años, en una China de tradiciones milenarias.
El Shanghai World Financial Center es, con sus 492 metros de altura, el edificio más alto de la ciudad y uno de los mayores rascacielos del mundo. Su construcción comenzó en 1997 y no terminó hasta once años más tarde, ofreciendo por fin a la ciudad su peculiar forma, que le ha hecho ser conocido popularmente como “el abrebotellas”.
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