El Palacio de Viana de Córdoba es también conocido como “Museo de los Patios”. Se trata de una casa señorial perteneciente a los marqueses de Viana, en el que se puede apreciar cómo ha ido evolucionando la arquitectura típicamente cordobesa desde el siglo XIV.
El Royal Botanic Garden representa para Sydney su particular pulmón verde, además de un oasis de especies, en el centro de la ciudad, que ocupa una extensión de alrededor de 30 hectáreas.
El Parque Gülhane de Estambul está situado en el centro de la ciudad, y por ello es un lugar ideal para descansar y respirar aire fresco después del bullicio de los museos, mezquitas o palacios. Este parque abierto al público en 1.912 formaba parte de los jardines del Palacio Topkapı en sus orígenes. Es la zona verde más extensa y antigua de la ciudad y una de las preferidas por sus habitantes los domingos...
El Parque Jingshan de Pekín está situado junto a la Ciudad Prohibida y cuenta con más de 800 años de antigüedad. Fue levantado por la dinastía Jin, a comienzos del siglo XII, y toma el nombre de la colina sobre la que está ubicado. Desde allí se puede observar todo Pekín a vista de pájaro. Para muchos son las mejores vistas que posee la ciudad.
El Jardín Yuyuan, construido entre 1559 y 1577, es uno de los más famosos y bonitos de todo el país, todo un oasis en el corazón de la bulliciosa Shanghai. Su frondosa vegetación esconde bellísimos edificios tradicionales y un mercado, lo que hace del paseo todo un descubrimiento.
El zoológico de Giza en el Cairo es el mayor parque y espacio verde de una ciudad que no se caracteriza precisamente por sus parques y jardines. Contiene una interesante colección de animales en peligro de extinción además de especies propias del país tanto animales como vegetales. Con más de 400.000 metros cuadrados es el zoológico más grande de Egipto y el más antiguo (abrió al público en 1.891).
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